Lo mejor para las alergias primaverales

Después del 18 de septiembre, la primavera está a punto de hacer su llegada triunfal con sus días más largos y temperaturas más cálidas, pero también trae consigo las poco bienvenidas y temidas alergias estacionales, con sus respectivos estornudos y ojos rojos.

Aunque es imposible evitar todos sus síntomas, podemos minimizarlos para lograr una mejor calidad de vida durante esta temporada. Aquí te entregamos 6 tips para sobrevivir a la temida primavera:

Los síntomas más comunes de las alergias primaverales incluyen:

• Estornudos frecuentes: Las personas con alergias primaverales tienden a experimentar estornudos repetitivos, especialmente después de la exposición al polen.
• Picazón nasal y en la garganta: Sensación de picazón intensa en la nariz y en la parte posterior de la garganta.
• Congestión nasal: Inflamación de la mucosa nasal que puede obstruir las vías respiratorias y causar dificultad para respirar por la nariz.
• Secreción nasal acuosa o mucosa: El exceso de mucosidad producido por la inflamación puede dar lugar a un goteo nasal constante o mucosidad acuosa.
• Ojos llorosos y enrojecidos: El polen también puede irritar los ojos, lo que provoca lagrimeo y enrojecimiento ocular.
• Comezón y enrojecimiento en los ojos: Sensación de picazón en los ojos, lo que puede llevar a rascarse y agravar el enrojecimiento.
• Fatiga y malestar general: Las alergias primaverales pueden afectar el sueño y causar fatiga y malestar en general.

Las alergias primaverales generalmente comienzan en primavera, como su nombre indica. El inicio exacto puede variar según la región y el clima, pero en la mayoría de los lugares del hemisferio norte, la primavera se extiende desde marzo hasta junio. Por lo tanto, es común que las alergias primaverales comiencen a manifestarse en esos meses, especialmente cuando los árboles, las flores y otras plantas comienzan a liberar polen al aire.

Aquí hay algunos tipos comunes de alergias primaverales:

• Alergia al polen de árboles: Los árboles como el roble, el cedro, el olmo, el abedul y el arce son conocidos por liberar grandes cantidades de polen en primavera. Cuando las personas alérgicas inhalan este polen, puede desencadenar síntomas como estornudos, picazón en los ojos, congestión nasal y goteo posnasal.
• Alergia al polen de pastos: Los pastos, como el césped, también liberan polen durante la primavera, lo que afecta a muchas personas alérgicas. Los síntomas de la alergia al polen de pastos son similares a los de la alergia al polen de árboles e incluyen estornudos, picazón en los ojos y nariz congestionada.
• Alergia al polen de flores: Si bien las flores vistosas y coloridas pueden ser hermosas, algunas personas pueden ser alérgicas a su polen. Aunque las flores en sí no liberan tanto polen al aire como los árboles y los pastos, pueden ser un problema para aquellos que tienen una alergia específica a un tipo de flor.
• Alergia al polvo y los ácaros: Durante la primavera, la limpieza y la confusión del polvo en el interior pueden desencadenar síntomas alérgicos en personas sensibles a los ácaros del polvo. Estos pequeños organismos se alimentan de partículas de piel humana y animal y prosperan en ambientes cálidos y húmedos.
• Alergias cruzadas: Algunas personas con alergia al polen también pueden experimentar síntomas alérgicos cuando consumen ciertos alimentos. Esto se debe a la similitud entre las proteínas del polen y las de ciertos alimentos. Por ejemplo, si una persona es alérgica al polen de abedul, es posible que también tenga reacciones alérgicas a ciertas frutas y verduras, como manzanas, peras, zanahorias y apio.